Cualquier problema de respiración, se produzca en al ámbito que se produzca, debe ser siempre atendido por los servicios médicos especializados.
Sin embargo, esta situación puede producirse de forma inmediata de tal forma que requiera de una intervención rápida y de urgencia para evitar males mayores hasta que podamos ser atendidos por los profesionales debidos.
En SOS Global Rescue somos profesionales especializados en socorrismo, sobre todo en el medio acuático y sabemos bien como gestionar estas y otras situaciones similares.
Por ello, algunos consejos para reaccionar de forma oportuna por parte de quienes acompañen o se encuentren cerca de la persona afectada nunca están de más.
Reaccionar de forma correcta ante una urgencia o problema de respiración:
Un problema de respiración puede darse en cualquier momento y a cualquier persona, sea de la edad que sea o aun cuando nunca haya dado muestras de patología respiratoria alguna.
Estas circunstancias son más frecuentes de lo que nos gustaría sobre todo en situaciones de presencia de medios acuáticos (playa, piscinas…) dado que debemos variar, modificar o incluso detener en determinados momentos y situaciones nuestro ritmo respiratorio para evitar la entrada de agua.
Ya sea en un ámbito o en otro, quienes no están debidamente capacitados o formados para la atención de personas en estas circunstancias de peligro, y con el ánimo de ser útiles y efectivos, pueden incluso propiciar el efecto contrario, complicando o entorpeciendo la situación.
Desde SOS Global Rescue proponemos una serie de medidas muy básicas que no sólo permitan mantener al afectado en el mejor estado en espera de la llegada de personal cualificado sino que eviten complicaciones innecesarias.
Una persona con un problema de respiración puede presentar, entre otros, alguno de estos síntomas:
- Asfixia.
- Mareo.
- Pérdida de conciencia.
- Vómitos.
- Sudor.
- Náuseas.
- Tos…
Ante esto, lo que procede es llamar inmediatamente a los servicios médicos y en caso de encontrarse en algún espacio de temática acuática como piscina o playa, al socorrista responsable.
Mientras recibe atención especializada, lo recomendable es:
- Librarlo de la presión de prendas de vestir ajustadas.
- Tomar el pulso.
- Propiciar que reciba aire exterior.
- No administrar comida ni bebida.
- Si el accidente ha sido en medio acuático, ha inhalado agua y mantiene la conciencia, puede ser de ayuda disponerlo de lado para propiciar la expulsión de la misma.
Todas estas recomendaciones parten de la premisa de que lo fundamental es avisar de inmediato a los profesionales sanitarios o de salvamento como ocurre entre el personal de SOS Global Rescue, con amplia formación en primeros auxilios y socorrismo acuático.