Consejos para protegerse del sol en verano
El Sol y su luz es nuestra fuente de vida y necesario para que nuestro cuerpo sintetice vitaminas fundamentales como la vitamina D o regular los ciclos de sueño. Sin embargo, en verano debemos ser especialmente cuidadosos con la sobreexposición a los rayos del sol, especialmente en ciertas latitudes como en España y Andalucía.
El verano es para disfrutar del buen tiempo, el sol, los baños en la piscina, los paseos por el mar. Si queremos disfrutar de todo esto de forma segura y saludable para nuestro cuerpo os recomendamos que sigáis estos consejos.
Utiliza crema de protección solar
En verano exponemos más nuestra piel al sol por lo que es importante protegerla con más atención. Tanto si estamos en la piscina o la playa como si vamos a dar un paseo por el campo es imprescindible que utilicemos una crema protectora solar adecuada para nuestro fototipo de piel. Lo idóneo es ponernos la protección solar en casa antes de salir y posteriormente repetir la aplicación cada cierto tiempo.
Recuerda que las duchas antes del baño en las piscinas públicas son también para retirar el exceso de crema, por tanto al salir de la piscina y tras ducharte para eliminar el posible exceso de cloro de tu piel es importante volver a echarse crema protectora. En verano podemos quemarnos incluso a la sombra. Por ello es importante utilizar una adecuada protección solar y tener especial cuidado con los bebés y niños pequeños.
Bebe agua
La deshidratación es otro efecto que puede producirse con frecuencia en verano, especialmente en niños y personas mayores. Es importante que bebamos agua o tomemos frutas para mantenernos hidratados.
Hay que controlar especialmente a los niños. Cuidado con los niños que están mucho rato en la piscina, al estar dentro del agua no son conscientes del calor pero están totalmente expuestos a la radiación solar. Es importante que cada cierto tiempo salgan de la piscina, beban agua o un zumo (sin azúcar) y se pongan un rato a la sombra.
No es nada aconsejable tomar bebidas alcohólicas, pues aumentan la deshidratación.
Cubre tu cabeza y tu cuerpo
Utiliza un sombrero o una gorra para proteger tu cabeza y la cara. En los hombres con poco pelo es bastante habitual que se quemen la cabeza tras un día de piscina o de playa. Recuerda ponerte crema y un sombrerito o gorra. Igualmente si vas a dar un paseo por la playa puede ser recomendable no ir totalmente descubiertos durante mucho rato.
Protege tus ojos con gafas de sol
No olvidemos proteger nuestros ojos de la radiación solar. Muchas personas usan gafas de sol porque les resulta molesto el exceso de luz o tienen fotofobia, pero no es la única razón por la que debemos usarlas. La radiación solar afecta de forma negativa a nuestros ojos y puede producir patologías importantes como quemaduras solares, oftalmia, pterigion, cataratas o incluso tumores. Es importante utilizar gafas homologadas y certificadas.